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Do–Ju: 11.30am–10.30pm

Vi–Sá: 11.30am–11.30pm

La Raclette Factory

en el Rindermarkt

Cuando lo moderno se encuentra con la tradición en la Raclette Factory, se crea una especie de "Cooltura Suiza 2.0". La Raclette Factory se basa en precios justos, alta calidad y mucha pasión.

 

Desde el gourmet hasta el vegetariano, todos deben encontrar algo para sí mismos. Nos dirigimos a jóvenes urbanos, vegetarianos, trabajadores, Quickluncher y  juerguistas.

 

La decoración y el interior es "alpino-elegante», mantenido atractivo y simple. Moderno y rústico. Con un té rico en la mano, nuestros huéspedes podrán disfrutar de Raclettes refinados en una docena de variaciones. Siempre nos dejamos inspirar por los eventos de la temporada. Nos basamos principalmente en los productos y los proveedores locales.

Nuestro Queso

 

Raclette es el queso semiduro suizo más popular con un sabor redondeado y una característica única de derretirse, incomparable con otros quesos semiduros. Raclette, como un plato nacional de Suiza, calienta la barriga y el alma de los conocedores, pero también es ideal para comerlo así como es o para platos calientes. La producción de nuestro queso es de acuerdo con las viejas recetas y con gran artesanía. Los quesos con cultivos específicos son mantenidos por un proceso especial hasta la plena madurez.

 

La producción de queso Raclette se ha convertido en una cultura en Suiza, donde los productores llevan sus conocimientos y habilidades y el orgullo profesional para crear un queso excepcional para usted. Y sólo los productos de la marca Raclette Suisse® garantizan absoluta naturalidad - sin aditivos o Materiales genéticamente modificados. Por eso, hasta la corteza se puede comer.

 

Nuestro queso no contiene gluten o lactosa (menos de 0,1 g / 100 g) y es rico en proteínas de alta calidad, aminoácidos esenciales, así como calcio y fósforo. Además, representa una buena fuente de vitaminas A, D, B2 y B12.

 

Verdadero queso Raclette suizo madura de 3-6 meses. Nosotros avalamos el origen de Suiza y una calidad impecable.

Origen:

Queso azul „Der blaue Schalk“ de Dani Camenzind, en Schalchen

La trufa de Christa Egli, de la quesería en Girenbad

El queso de vino blanco y oporto de Peter Schneider, en Bäretswil

El Raclette de oveja de Thomas Hungerbühler, en Toggenburg

El queso de cabra de Koni Schuppli, en Girenbad

Queso
Raclette Factory Zürich Klassiker

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La Leyenda

Antiguamente la vida de los lecheros fue dura. Menos mal que los lecheros en los Alpes Suizos podían recuperar las fuerzas con un Raclette sabroso. Porque no sólo la existencia pobre en la montaña, sino también los espíritus malos les hizo la vida demasiada dura a los valientes lecheros. De lo cual cuenta la siguiente leyenda del lechero Melchior, el que durante la búsqueda de un ternero escapado tuvo que dormir en un albergue alpino decaído en la que - se dice en el pueblo – esta embrujada. El lechero se animó y entro al cuarto oscuro. Como su estómago estaba gruñendo comenzó a buscar la cabaña y encontró un trozo de queso abundante. Se dirigió a la cocina, se calentó el mismo y comenzó a tostar el queso en el fuego.

De repente se abrió una ventana pequeña, la cabeza de un cerdo repugnante con ojos tojos sonrió y quería el queso de Melchior. El lechero temblaba de miedo, pero no se movió ni un  centímetro. Pero cuando el monstruo no dejo de molestarlo por el queso, el lechero se enojó. Agarró la espátula de queso y le pego al cerdo en sus dedos de salchicha. "Manos fuera, gordito!" exclamó. "O entras o desapareces!" La bestia saltó al medio de la habitación con un gruñido. El lechero valiente dejo el cerdo ser cerdo y se encargó de su queso. Cuando el monstruo vio como derritió el queso maravillosamente fragante, puso su pie al fuego, lo asó y le dijo al lechero que lo pruebe. Pero a diferencia de su queso, Melchior se mantenía fuerte: "Tu como lo tuyo y yo lo mío!" le reñía al espíritu no invitado. De ahí el monstruo exploto de rabia, alboroto por la habitación y finalmente despareció por la chimenea.

Sí, la vida de los lecheros no hubiera sido tan fácil, si no hubieran tenido un Raclette bueno y fuerte que da valentía en el momento adecuado.

Leyenda

La Historia

del verdadero queso suizo Raclette

Raclette origina de Wallis, Suiza, y tiene una tradición de más de 400 años de antigüedad. Las primeras notas escritas se pueden encontrar en el siglo 19. En 1812 Dr. H. Schiner menciono en su descripción del departamento del Simplon una tradición del Val d'Anniviers, según lo cual las fiestas comienzan y terminan con queso tostado ("rôti fromage").

Otros autores cuentan de noches delante del retiro alpino en Val d'Anniviers. "Algunos pastores se sientan alrededor de un fuego y supervisan una la rueda grande de queso, el que han expuesto al fuego. Ni bien el queso comienza a derretirse, uno coge un cuchillo, y raspa la parte derretida del queso en un pedazo de pan".

Recién a principios del siglo 20 el "queso tostado" comenzó a ser conocido por el público más amplio. En la Exposición Cantonal de 1909, los mejores vinos de la región fueron presentados y para acompañar sirvieron "queso tostado". Para darle un nombre que se podía usar en esa ocasión, el nombre "Raclette" fue escogido. Y así la palabra francesa "racler" fue creada, en español "raspar", de acuerdo con la típica preparación de comidas en Wallis y en la gastronomía de hoy en día.

Historia
Raclette Factory Zürich Flammkuchen

Sobre Nosotros:

La creación de la Raclette Factory

Sobre Nosotros
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